Ignacio es la cuarta generación de una familia dedicada a la hostelería desde 1938. Con trece años ingresa en la Escuela de Hostelería de Laredo (Cantabria), una vez finalizado su ciclo formativo, con 18 años, empieza un recorrido por varios territorios del país, trabajando en restaurantes de renombre como Real Club Náutico de Laredo, Aldebarán en Badajoz, Túbal en Tafalla y Europa en Pamplona, adquiriendo conocimiento y experiencia que le forman para asumir la dirección del negocio familiar en 2004.
Con 24 años llega su momento y empieza a redireccionar la propuesta culinaria del restaurante familiar con una cocina contemporánea, actual y con memoria de los afamados guisos de su madre. Con 27 años reforma un anexo al establecimiento para ofrecer un nuevo salón-restaurante gastronómico, siendo el actual Solana.
Con 31 años logra la primera estrella Michelín, siendo uno de los 10 cocineros nacionales más jóvenes en conseguirla, en este recorrido obtiene bastantes premios y reconocimientos, algunos de los más importantes son, Premio Arco-atlántico 2014 al mejor cocinero del Cantábrico, Premio a la Mejor Croqueta del mundo 2017 en Madrid Fusión, un Sol en la Guía REPSOL. También es uno de los cocineros más avalados por la crítica especializada, es así, que ha realizado ponencias en varios de los congresos gastronómicos más importantes del mundo.
Actualmente el chef se encuentra en su mejor momento, su versión contemporánea de la cocina Cántabra le hace ser una propuesta segura que abarca un gran número de paladares, consiguiendo una diferenciación que ha convertido su restaurante en una visita imprescindible.


